El de ayer fue un día especial hablando de pesca, aunque a priori pintaba mal la cosa.
Llegue tarde a la cita con el compañero Jano, así que fue el quien se encargo de mirar zona donde poder pescar, pues daban aumento considerable para medio día y con un viento muy fuerte acompañando. Tras decidir donde ir, nos cambiamos y encaramos la bajada a la playa....cuando vemos bien el mar casi casi damos media vuelta jejeje...aun así, tras unos minutos mirándola seguimos adelante y entramos a resguardo.
Ya en el agua nos dirigimos al lugar de pesca y a medio camino tenemos que dar la vuelta porque saliendo del resguardo la cosa pintaba mal....volvemos sobre nuestros pasos buscando alguna zona con pescado, pero no se ve una cola.
Después de un par de horas por fin damos con una zona donde al menos se ve algún pez, un buen banco de sargos, aunque no muy grandes, y unas bajadas donde las bogas se amontonan a nuestro alrededor, son el preludio de la entrada a medias de un buen breado que pasaría muy justo de los dos kilos, y digo a medias porque hizo el amago tres veces al limite de la visibilidad, que en esa zona no era muy grande, y se piro.
En una de las bajadas, tras rodear una piedra grande, veo por un agujero bajo esta una franja inconfundible en el hocico que se deja ver por el pequeño hueco, que al verme empieza a moverse acompañada por otra y un sargo al menos....sigo rodeando la piedra a ver si tengo tiro por alguna entrada, pero no las consigo ver.
Llamo a Jano para que venga, y empiezo a hacer bajadas revisando todas las entradas, que no dan resultado, así que se suma el compañero también sin resultados. Tras unas cuantas bajadas infructuosas decido dejar el fusil colgado de la boya y entrar a revisar bien bajo la piedra por un hueco donde entraba algo justito...y....bingo, ahí estaba!!
Subo a por el fusil, e intento relajarme para preparar la bajada, el pulso a mil, y la adrenalina por las nubes no me dejan concentrarme y no quiero esperar mucho pues si la otra y el sargo se fueron esta posiblemente también lo haría. Entro dentro y por un segundo no la veo, se había cambiado a una esquina de la cueva, apunto, esta mirando al techo y dándome la espalda, espero un poco hasta que se gire para mostrarme el lomo, y por fin, disparo!!!
No me lo podía creer, mi primera pepona, un día para el recuerdo!. Un par de kilates de puro oro, así es como la aprecie yo jejeje, os dejo alguna foto de la sesión jajaj. Un abrazo
Llegue tarde a la cita con el compañero Jano, así que fue el quien se encargo de mirar zona donde poder pescar, pues daban aumento considerable para medio día y con un viento muy fuerte acompañando. Tras decidir donde ir, nos cambiamos y encaramos la bajada a la playa....cuando vemos bien el mar casi casi damos media vuelta jejeje...aun así, tras unos minutos mirándola seguimos adelante y entramos a resguardo.
Ya en el agua nos dirigimos al lugar de pesca y a medio camino tenemos que dar la vuelta porque saliendo del resguardo la cosa pintaba mal....volvemos sobre nuestros pasos buscando alguna zona con pescado, pero no se ve una cola.
Después de un par de horas por fin damos con una zona donde al menos se ve algún pez, un buen banco de sargos, aunque no muy grandes, y unas bajadas donde las bogas se amontonan a nuestro alrededor, son el preludio de la entrada a medias de un buen breado que pasaría muy justo de los dos kilos, y digo a medias porque hizo el amago tres veces al limite de la visibilidad, que en esa zona no era muy grande, y se piro.
En una de las bajadas, tras rodear una piedra grande, veo por un agujero bajo esta una franja inconfundible en el hocico que se deja ver por el pequeño hueco, que al verme empieza a moverse acompañada por otra y un sargo al menos....sigo rodeando la piedra a ver si tengo tiro por alguna entrada, pero no las consigo ver.
Llamo a Jano para que venga, y empiezo a hacer bajadas revisando todas las entradas, que no dan resultado, así que se suma el compañero también sin resultados. Tras unas cuantas bajadas infructuosas decido dejar el fusil colgado de la boya y entrar a revisar bien bajo la piedra por un hueco donde entraba algo justito...y....bingo, ahí estaba!!
Subo a por el fusil, e intento relajarme para preparar la bajada, el pulso a mil, y la adrenalina por las nubes no me dejan concentrarme y no quiero esperar mucho pues si la otra y el sargo se fueron esta posiblemente también lo haría. Entro dentro y por un segundo no la veo, se había cambiado a una esquina de la cueva, apunto, esta mirando al techo y dándome la espalda, espero un poco hasta que se gire para mostrarme el lomo, y por fin, disparo!!!
No me lo podía creer, mi primera pepona, un día para el recuerdo!. Un par de kilates de puro oro, así es como la aprecie yo jejeje, os dejo alguna foto de la sesión jajaj. Un abrazo
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